La reinvención del dentista: la excelencia en la gestión es la clave del éxito

El Dr. Primitivo Roig afirma que las técnicas de gestión ayudan a conseguir
 los cuatro objetivos fundamentales en la clínica.

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By Primitivo Roig* - January 22, 2019

La evolución del sector odontológico, provocada por el crecimiento de la competencia, el desarrollo tecnológico, los avances clínicos o las nuevas exigencias y necesidades del paciente, nos permite ahora constatar lo que siempre fue evidente: ser un gran dentista es imprescindible, pero no es suficiente para triunfar y ofrecer lo mejor al paciente.

Lamentablemente, no son una excepción los casos de profesionales que no aprovechan al máximo sus habilidades técnicas y su talento clínico. La mala suerte tiene cada vez menos peso en el devenir profesional de un dentista y de su equipo. El fracaso responde en muchas ocasiones a una falta de planificación empresarial, a la ausencia de planes de carrera profesional, a errores de método en la toma de decisiones, a no haber estudiado pertinentemente el entorno, a no haber definido un público objetivo, a carecer de sistemas y protocolos de gestión en la clínica dental, a no haber comprendido las necesidades y exigencias reales de los pacientes, al uso de estrategias de gestión inadecuadas para el dentista, así como a muchos otros factores que se alejan de aspectos de índole puramente clínicos.

La realidad actual nos conduce a reinventarnos como dentistas, sin que eso signifique perder nuestra esencia. El éxito de cada dentista depende de la aplicación en su ejercicio profesional de una filosofía, enfoque clínico, sistema de gestión, organización y modo de acción que responderá a una fórmula única compuesta por distintos factores políticos, culturales, sociales, técnicos, económicos y/o personales. Sin embargo, toda fórmula de éxito profesional debería añadir un elemento: la excelencia en la gestión. Hacerlo nos ayudará en el objetivo común de todo profesional, que es alcanzar el éxito profesional de forma honesta, ofreciendo el mejor servicio posible a los pacientes y colaborando en el mejor posicionamiento de la odontología.

La gestión es una disciplina mucho más cercana a la praxis clínica y al día a día del dentista de lo que quizá algunos colegas puedan pensar. La gestión está y debe estar en el ADN del dentista. La gestión odontológica debe abarcar todas aquellas temáticas que nos ayuden a conseguir cuatro objetivos fundamentales:

• Ser mejores profesionales
• Trasladar esa mejora en un mejor servicio al paciente
• Disfrutar de ejercer en un ambiente de excelencia y en equipo que nos haga más felices

Conseguir todo lo anterior en un ambiente de eficiencia y rentabilidad que nos permita hacer sostenible nuestra actividad y prorrogar nuestra felicidad y la de nuestros pacientes.

La odontología ha progresado a nivel clínico a través de la senda de la evidencia científica y el desarrollo tecnológico. Sin embargo, cuando hablamos de gestión, todavía hay una gran dependencia de la lógica, del sentido común o del ‘storytelling’, que si bien son útiles, no son ni mucho menos suficientes. Convencido de que la investigación y la ciencia deben también ayudarnos a gestionar con éxito y a tomar decisiones con más acierto, los dentistas debemos incorporar un conocimiento nuevo y empírico que nos ayude a implementar soluciones útiles para nuestras clínicas. Un conocimiento práctico que respete nuestra naturaleza profesional, que nos ayude a ser más eficientes, optimizar recursos, ser más productivos y ofrecer a nuestros pacientes un servicio excelente.

Saber interpretar nuestro entorno, organizarnos internamente, la dirección de equipos y personas, el liderazgo, la planificación empresarial, la gestión financiera, la creación de valor, el marketing, la comunicación, la gestión del tiempo o la mejora continua son solo algunos de los aspectos a añadir a nuestra capacitación. Todo ello siempre desde una perspectiva odontológica y teniendo en cuenta que la clínica dental es una empresa, pero no cualquier tipo de empresa, y que nuestra naturaleza única exige de unos protocolos y conocimientos adaptados con respecto a otro tipo de sectores o industrias.

La gestión impacta de manera directa sobre el devenir de nuestro presente y futuro como dentistas:

El impacto de la gestión en el rendimiento de la clínica dental: muchas clínicas dentales no aprovechan al máximo toda su capacidad y potencial debido a la falta de formación, de recursos y de habilidades en gestión.

El impacto de la gestión en el éxito profesional: conocimientos en dirección odontológica, en planes estratégicos, en estudios de mercado, organización profesional u otros aspectos son imprescindibles para que todo dentista disfrute del progreso y el crecimiento profesional.

El impacto de la gestión en la relación clínica-paciente: los pacientes no tienen el conocimiento científico necesario para evaluar y aprobar los servicios odontológicos de una manera técnica, y por ello se apoyan en la experiencia del servicio recibido. La gestión y atención al paciente son elementos altamente eficaces para diferenciarse y para satisfacer a los pacientes.

Ser un buen dentista y ser capaz de ofrecer una odontología excelente es un requisito indiscutible. Si bien, en un tiempo en el que la práctica clínica está tan especializada y cuenta con tantos buenos profesionales, se hace difícil diferenciarse únicamente mediante la capacidad técnica y científica —cualidades que, no obstante, deben seguir desarrollándose, pues son la base del oficio odontológico—. Es imprescindible combinar la excelencia en la praxis clínica con un correcto enfoque empresarial y gestión de nuestra actividad. Ese será, sin duda, el principio de la resolución de la inmensa mayoría de amenazas y retos a los que se enfrenta cada dentista y todo el colectivo profesional.

Hoy más que nunca se necesitan dentistas líderes, comprometidos por mejorar la profesión, crear equipos de trabajo, compartir y contagiar pasión por la odontología ética y de calidad. La odontología sigue siendo una profesión repleta de oportunidades en las que un compromiso con la formación en gestión y la aplicación de sus conocimientos mejorará cualquier fórmula del éxito.

* El Doctor Primitivo Roig, odontólogo y especialista en gestión, es fundador de “dentalDoctors Institute of Management” y creador de la filosofía denominada “Slow Dentistry”, cuyo objetivo es maximizar la calidad profesional y el rendimiento de la clínica.